A los que nos gusta comer nos encanta hacer la etapa de hipertrofia porque es el momento del año cuando más calorías consumimos. Cuando acaba el verano y lucir abdominales ya no tiene sentido, ahora toca subir de peso y engordar unos kilos.
Pero muchas veces la gente se equivoca y piensa que una dieta ‘bulking’ consiste en atiborrarse de todo lo que encontramos por casa con el fin de aumentar el músculo mientras nos machacamos en el gimnasio. Sin embargo, hay que tener delicadeza con esta dieta porque no vale consumir de todo y a que saber cuando parar. También habría que ver que ejercicios estas realizando en el gimnasio (ya que la dieta+ejercio van de la mano).
1.- Tienes mucha grasa corporal
Recuerda que lo que buscamos es crear músculo, y aunque en cierto modo esto conlleva también a tener un aumento de grasa corporal hay que controlar este porcentaje. Si tu grasa corporal está por encima del 15% te será muy complicado ganar músculo.
Los niveles de testosterona empiezan a descender una vez alcances el 20% de grasa corporal. Así que si tu índice de grasa corporal se ha llevado demasiado, mejor empieza a quemar calorías porque no verás grandes resultados.
2.- Tu ropa empiezan quedarte mal
Tanto como si engordas o adelgazas muchas notarás un gran cambio en tu ropa. Si la ropa que utilizabas hace unos meses que te quedaba bien ahora te empieza a quedar ajustada, o se te cae el pantalón.
Mejor revisa tu dieta y tus entrenamientos porque quizás no sea buena señal. Normalmente en las dietas de volumen la ropa nos queda más ajustada, pero a veces esto no siempre es una buena señal. Quizás sea momento de estudiar tu grasa corporal. Si empiezas a ver tu estomago colgando sobre tus pantalones quizás esto sea un buen indicador de que no vas por buen camino
3.- Comes más carbohidratos procesados que alimentos integrales
No cambies tu dieta radicalmente por sólo conseguir más carbohidratos. Está bien que estén en tu dieta, pero dedicarse a comer pechuga de pollo y Ben & Jerry’s no es la mejor solución para hacer crecer el músculo.
Intenta tener variedad de alimentos en tu dieta, no elimines los alimentos integrales de tu dieta. Antes en la fase de volumen se consumía carne magra, verduras y carbohidratos complejos.
4.- No haces cardio
Piensas que la fase de volumen es engordar y engordar, pero no. Hay que mantener los porcentajes de grasa corporal bajos. Si no sólo estás dando grasa inservible para tu cuerpo y tendrás que deshacerte de ella tarde o temprano y si dejas que esa grasa crezca te resultará más difícil eliminar cuando quieras definir.
Al consumir muchas más calorías estás aumentando de peso, y aunque trates de comer sano siempre tendrás un aumento de grasa. Aunque no busques el déficit calórico recomendable para adelgazar, intenta hacer algo de cardio a la semana para mantener el porcentaje de grasa bajo. No te excedas con el cardio tampoco ya que podrías también perder músculo que ya habías desarrollado.
5.- Subes de peso pero no de fuerza
Si ves como aumentas de peso en la báscula pero en tus entrenamientos no has desarrollado más fuerza es que algo va mal. Aunque no estés haciendo un entrenamiento de fuerza, deberías de notar un aumento en tu fuerza.
El entrenamiento de hipertrofia implica un aumento de músculo y también de fuerza, que deberías de apreciar en los ejercicios principales como: press de banca, sentadilla, press militar y peso muerto. Si en estos ejercicios tus kilos se han quedado estancados es que algo falla. Aunque normalmente es debido al entrenamiento, pero revisa tu dieta también.
